viernes, marzo 30, 2007

Grandes gorras...

... pantalones de pinzas y zapatos sucios. Tienen toda la pinta de tener pequeñas pollas. Tan pequeñas como grandes sus gorras. Es así la puta policía de Moscú. Me llevan jodiendo todo el día... con su mirada. Mi primer día en esta ciudad y ya me siento mal. Y no es el primer estado policial que visito pero, joder, aquí la gente está como muy pasada... cabreada... triste. He regalado una super sonrisa en el control de pasaportes y me lo ha tirado a la cara, casi. Aquí ni sonrisas ni minibromasmini. Todos corren... no hay eye-link... el metro vuela. Debe pillar lo menos 50 nudos... puto metro-bala. Como las escaleras mecánicas; ya me han dicho que los ancianos las pasan putas para cogerlas, pero a nadie parece importarle. Aquí todos andan deprisa... como el metro y como las escaleras mecánicas.
Las autopistas están medio colapsadas... en parte por el tráfico en parte por el Lada averiado con el que te encuentras en el carril central cada 500 metros.
Entras en un centro comercial y te hacen retroceder hasta una estación de tren para dejar tu maleta en una consigna. Y dentro, del centro, cada 20 metros hay un ucraniano (me han dicho que no son ucranianos sino rusos de provincias), como el portero del Why Not, que te mira de arriba abajo como si fueras a explotar tu cinturón de dinamita.
Aquí nadie lleva mi anillo gótico, ni una pulsera ni con mi bandera ni con la suya... ni un bolso Diesel, ni camisetas Custo con flores y reflejos dorados.
El cambio horario... dos horas teóricas pero cuatro en su alma... y así ando buscando sueño para acostarme mientras van ya por la segunda fase REM.
El fin de semana estuve en el protectorado... y (casi) lo echo de menos. Cuanto más visitas... los vikingos, las colonias, los sarracenos, oriente, ... más lo ves. Castilla [y satélites en general] es un [puto] paraíso.
¿Mañana más?

4 comentarios:

Colette dijo...

Pero nene, no sufras y disfruta de las cosas buenas, que seguro que hay. Es que con el frío que hace la gente no siente ganas de sonreir. Yo lo comprendo, a mi me pasa exactamente lo mismo.

Y sobretodo, no cabrees a los ucranianos y no te dejes guiar por la amabilidad de los agentes de inmigración, inexistente en cualquier país(si yo te contara lo agradables que fueron conmigo en Dominicana...)

Un besazo y nos vemos por el sur. Dame un toque cuando bajes

Lola Steiner dijo...

Diles a los de imigracion que eres sobrino (lejano) del embajador español. A mi me funcionó en Argelia.

Cayetana Altovoltaje dijo...

Y yo que te hacía en Cádiz... si no veo foto, no me lo creo. Ale.

El acariciador loco (II) dijo...

Bueno, esta noche estaré ya en Castilla y mañana en Cádiz, si los Dioses quieren. Llevo un par de semanas de mucho viaje... pero de momento voy hacia el aeropuerto, a ver si desde allí puedo enviar algo, que ahora voy un pelo pillado... :-P